10 de junio de 2015

LA POESÍA ESPAÑOLA: Ilustración y Romanticismo. Siglos XVIII y XIX. por José Antonio Asensio.

En el Colegio de Doctores y Licenciados (CDL). Continuamos nuestro RECORRIDO POR LA POESÍA ESPAÑOLA: Ilustración y Romanticismo. Siglos XVIII y XIX. Conducido por José Antonio Asensio.
 José A. Asensio y Paco Burló

Un repaso a la poesía del Siglo de la Luz y Poesía romántica. Se leerán hermosos poemas de la época por parte de nuestros socios: Rocío Espinosa, Mari Carretero, Ramón Fernández "Palmeral", Luis Quesada y José A. Asensio, de Espejo de Alicante.

Características de la Ilustración en España.

El movimiento ilustrado surgió en la Europa del siglo XVIII como una forma de entender el mundo, la existencia y la sociedad, que '· no derivaba de los textos sagrados ni de la "tradición" sino que
quería constituirse como alternativa a éstos, al "iluminar" las sociedades europeas para que abandonaran definitivamente la ignorancia y la superstición y se basaran en ideas racionales. En
el Diccionario de autoridades publicado por la Real Academia Española entre 1726 y 1739 se definía «luz de la razón» como «el conocimiento de las cosas que proviene del discurso natural que
distingue a los hombres de los brutos», que iba unido a la «luz de la crítica» o las «luces críticas», por cuanto «las luces» "no solo remitían al cultivo de la inteligencia y al conocimiento adquirido
por un reducido número de personas, sino también ... al uso crítico de la razón frente a los prejuicios heredados del pasado."


Una cultura tutelada por el Estado
Voltaire

 "la cultura de la Ilustración, por muy elevadas que fueran sus aspiraciones de libertad y humanitarismo, fue una cultura tutelada y, en no pocas ocasiones, dirigida y controlada para
mejor servicio del Estado y sus intereses. Sus creadores y protagonistas -excepto en aquella especie de paraíso de las libertades en que se habrían convertido Inglaterra y Holanda y salvo algún autor peculiar que, como Voltaire, consiguió vivir acomodadamente gracias a un público fiel- fueron en gran medida, funcionarios, oficiales, burócratas, magistrados o ministros de la corona, profesores universitarios cuya promoción y carrera dependían del favor real, eruditos y anticuarios a sueldo de              mecenas principescos -laicos y eclesiásticos-, científicos pertenecientes a las academias reales, así como a las escuelas militares y de ingenieros, clérigos más o menos regalistas.


El Romanticismo
Rosalía de Castro.
El Romanticismo se inició en 1834 con la publicación del poema El moro expósito, del Duque de Rivas, y el estreno del drama La conjuración de Venecia, de Martínez de la Rosa.
Su vigencia apenas sobrepasó una decena de años, si bien la novela que inaugura el Realismo (La gaviota, de Fernán Caballero) se editó en 1849 y todavía algunos escritores continuaron por algún tiempo dando a la imprenta sus creaciones románticas y representando sus dramas históricos.
Posteriormente pervivieron sus valores en románticos rezagados como Gustavo Adolfo Bécquer, uno de los poetas más excelsos del siglo, y Rosalía de Castro.


 La creación literaria
Durante el Romanticismo la creac1on literaria sirvió para manifestar espontáneamente la subjetividad, el sentimiento y la emoción, la insatisfacción generada por un mundo frustrante
que hizo preferir épocas pasadas al prosaísmo de la contemporánea (de ahí el gusto por las historias medievales manifestadas en dramas, novelas, leyendas, etc.). Característico de este tiempo es un desasosiego espiritual causado por el choque entre lo deseado y lo vivido, por la confrontación entre
el ideal y la realidad, el yo y el mundo.

Bécquer.

 Dejo paso a los vídeos de la Charla de José A. Asensio:


LA POESÍA ESPAÑOLA: Ilustración y Romanticismo. Siglos XVIII y XIX. por José Antonio Asensio. from Antonio Franchi Perez on Vimeo.


Por orden de aparición:

  • La literatura en el siglo XVIII 


  • La literatura en el siglo XVIII. La lírica


  •   El romanticismo


Personas que asistieron al acto: