26 de abril de 2012

Guernica recuerda el bombardeo aéreo que la marcó hace 75 años


En el marco de la Guerra Civil Española, la ciudad sagrada de los vascos fue arrasada con 50 toneladas de bombas lanzadas por la aviación alemana e italiana, aliadas del franquismo. Guernica sirvió como un experimento para la aviación nazi, que años después destruyó decenas de ciudades europeas durante la Segunda Guerra Mundial.

 Nombre: Guernica
Autor: Pablo Picasso
Fecha: 1937
Técnica: Óleo sobre lienzo
Medidas: 349,3 x 776,6 cm.
Ubicación: Museo Centro de Arte Reina Sofía, Madrid

La ciudad cuya destrucción inspiró el cuadro más famoso de Pablo Picasso se ofrece 75 años después como un símbolo de paz frente a los horrores de la guerra mientras conserva la esperanza de acoger el lienzo que hoy se encuentra en un museo de Madrid.

El bombardeo de Guernica, desatado el 26 de abril de 1937, constituye una fecha imprescindible en la historia de la Guerra Civil española (1936-1939), que enfrentó al bando republicano con las tropas del general sublevado Francisco Franco, aliado con los nazis alemanes y los fascistas italianos.

Los nacionalistas vascos combatían al lado de la República, y su ciudad "santa", como la recuerda uno de sus sobrevivientes, Luis Iriondo, fue atacada por la Legión Cóndor alemana y la Aviación Legionaria italiana.
La memoria de la barbarie sigue presente en Guernica, que hoy jueves recuerda el aniversario 75 del devastador ataque aéreo, en las esculturas de los reconocidos artistas Eduardo Chillida y Henry Moore, un mural cerámico que reproduce el lienzo de Picasso, placas con poesías que evocan el bombardeo y un busto de George Steer, el periodista que narró los hechos en el periódico británico The Times.

Guernica es hoy una población que apenas sobrepasa los 15.000 habitantes, los lugareños conversan, principalmente en euskera, la lengua vasca prohibida durante la dictadura de Franco (1939-1975).

El lugar conserva la Casa de Juntas y el Arbol Sagrado que simbolizan el autogobierno vasco, así como una estructura productiva que, al igual que antes de la guerra, se basa en la industria y el comercio, aunque ahora trata de aprovechar los flujos turísticos que, desde hace una década, se dejan ver en Bilbao, a escasos 30 kilómetros del lugar, gracias al impulso que trajo el emblemático Museo Guggenheim.

Restaurantes asiáticos y carnicerías 'halal' regentadas por ciudadanos magrebíes se instalaron en la calle principal de Guernica, la misma que los presos políticos del franquismo reconstruyeron al término de la Guerra Civil en una atmósfera marcada por la represión y el miedo a hablar del bombardeo, que la propaganda franquista atribuyó al bando republicano de la guerra civil para desviar su responsabilidad.

"No digáis que Guernica fue bombardeada. Hay que decir que fue quemada por los rojos", fue el primer mensaje que recibió Iriondo, el sobreviviente, cuando regresó al lugar tras refugiarse unos meses en Francia junto a su madre y dos de sus hermanos.

"(El día del bombardeo) durante casi cuatro horas y en distintos intervalos, desde las 16.30 horas, aviones alemanes lanzaron más de 50 toneladas de bombas, destruyendo así tres cuartas partes de las construcciones de Guernica, pero dejaron intactas las fábricas y los edificios tradicionales del autogobierno vasco", dijeron a los historiadores José Ángel Etxaniz y Vicente del Palacio.

"Cuando atravesábamos el mercado sonaron las primeras explosiones", dijo Iriondo, entonces de 14 años. "La gente, asustada, corrió a los refugios".

El precedente del bombardeo de Durango, una localidad a 20 kilómetros de Guernica en la que la aviación italiana había causado la muerte a 336 personas el 31 de marzo de 1937, estimuló la necesidad de disponer de una serie de refugios por todo el poblado.

"A mí me empujaron al interior de uno de ellos", expresó Iriondo. "Hacía mucho calor porque el techo era bajo y no había ningún sistema de ventilación. Tampoco había luz. Al cabo de pocos minutos, costaba mucho respirar. Intentaba aspirar el aire pero no me llegaba a los pulmones. Creí que iba a morir asfixiado", agregó.

Cuando cesaron las bombas comprobó que "todo Guernica era una hoguera".

La destrucción allanó el camino para que las tropas de Franco tomaran la ciudad de Bilbao apenas dos meses después. La quema de todos los registros oficiales ha dificultado el conocimiento del número definitivo de víctimas. Etxaniz y Del Palacio, autores de un estudio sobre el tema, cifran en 153 los muertos, pero creen que el número definitivo puede superar los 200.

El bombardeo se recuerda también en Alemania. En 1997, el entonces presidente alemán, Roman Herzog,envió una carta a los sobrevivientes pidiendo perdón por el bombardeo.

Jorge Garma. AP





Guernica Europa
Este montaje está basado en imágenes del documental Guernica de Santiago Torres y Ramón Vallés y música de Amparo Sánchez.. 
El 26 de abril es el aniversario del bombardeo de Guernica. Durante cuatro horas, la ciudad fue objetivo de la Legión Cóndor y los Fiat y Savoia italianos. 
El bando franquista negó los hechos. Steer, corresponsal del Times y el New York Times llegó a las 23 horas a Guernica. La ciudad todavía seguía ardiendo. Este montaje alude también a la ocupación nazi, la liberación, la bomba atómica como cancelación absoluta de los ideales ilustrados y finalmente, Masacre en Corea. 
El final coincide con el dibujo de la paloma de la paz sobre el informe del FBI abierto a Picasso. Su finalidad es eminentemente educativa.