19 de mayo de 2011

Cerca de 150 manifestantes organizan una cacerolada en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia

Cerca de 150 personas se han congregado este jueves en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia para participar en una cacerolada organizada por el denominado 'Movimiento 15M' con la que han querido demostrar, una jornada más, su desencanto ante el sistema político y económico y en la que se han coreado lemas como 'menos corrupción, más repartición'.

Armados con cacerolas, sartenes, cazos o latas de bombones, jóvenes, adultos y pensionistas han comenzado esta sonora protesta al mediodía al son de proclamas como 'lo llaman democracia y no lo es' o 'no nos mires, a ti también te roban' y muchos transeúntes se han acercado durante el acto hasta las mesas informativas habilitadas en la plaza para informar sobre los objetivos del movimiento.
Este es el caso de Juan Manuel, un jubilado que ha alabado este tipo de protestas pacíficas, aunque ha criticado que se diga que no hay democracia'. 'Democracia hay, quien diga que no miente; lo que pasa es que los políticos se apoltronan cuando salen elegidos y no se fijan en lo que deberían fijarse, pero cada uno puede presentarse y votar a quien le dé la gana', ha señalado.
A su juicio, resulta adecuado dar 'un toque de atención' a la clase política para que escuche al pueblo, aunque ha recordado que 'el mandar es lo más difícil que hay; desde la barrera los toros se ven fáciles, pero el que tiene que tomar decisiones es el único que se puede equivocar'.
Durante las últimas horas, muchos valencianos se han acercado hacia el epicentro de las manifestaciones en la ciudad para abastecer de comida y utensilios a los jóvenes que han acampado, como es el caso de Juan García, que les ha llevado esta mañana bocadillos de jamón y tomate para que 'cojan fuerzas' y sigan con la protesta.
Según ha comentado a Europa Press, este movimiento tenía que llegar y Europa y el mundo 'debería tomar ejemplo de lo que está pasando en España'. 'Se puede ganar una batalla sin mandar a los hijos o nietos a la guerra, se puede desmantelar una tela mal hecha', ha insistido en relación a la constitución del Estado democrático en España.
García ha criticado que actualmente en el país hay una juventud 'muy preparada y no les dejan ejercer lo que quieren' a causa de políticos que 'nos han tomado el pelo muchos años'.
No obstante, ha matizado que estas protestas no deben desmantelar por completo el sistema económico actual, sino mejorarlo: 'un empresario es empresario para ganar dinero, sino no lo es, pero que no ganen tanto', ha reclamado García. En cualquier caso, ha valorado que estas acciones transmitirán a los gobernantes que 'el pueblo no es tan ignorante, que está sobre ellos'.
LLEGAR A TODA LA POBLACIÓN
Las redes sociales han sido fundamentales a la hora de conformar y transmitir los objetivos del denominado movimiento 15-M, surgido a raíz de las manifestaciones convocadas el pasado domingo, 15 de mayo, por la plataforma Democracia Real Ya.
Ahora, iniciativas como la cacerolada buscan precisamente extender estas movilizaciones al ciudadano de a pie, a las familias y a aquellos sectores que no tienen acceso a Internet y a las redes sociales, según ha señalado el responsable de prensa del movimiento, Kel Sang.
Otro de los portavoces del movimiento, Mario Borrás, ha indicado a Europa Press que esta es la experiencia 'más divertida e ilusionante' que ha vivido desde la Transición, y ha criticado a aquellos que acusan a los manifestantes de no tener un ideario de propuestas alternativas a las que critican.
'Los que dicen eso, no nos están escuchando. Estamos hartos de hacer propuestas. La primera es que o seamos un estado centralizado o federal, pero no que seamos un estado franquista, central y federal a la vez; eso es absurdo y no hay quien lo pague', ha resaltado.
Asimismo, ha valorado que hasta la fecha nadie les ha prohibido la concentración --ni la Junta Electoral Provincial, ni Delegación del Gobierno ni el Ayuntamiento se han pronunciado en contra-- aunque ha apuntado a que, probablemente 'una de las razones por las que no nos han echado es que el PP espera ganar las elecciones en el Ayuntamiento y en la Comunidad y perciben que esto perjudica al PSOE, así q están la mar de contentos con nosotros'.
'HASTA QUE NOS ECHEN'
Según ha afirmado, su objetivo es quedarse en la plaza del Ayuntamiento hasta que les echen y pasar allí también la jornada de reflexión del sábado: 'queremos quedarnos aquí aunque sea callados u si nos echan, tendremos que irnos, pero volveremos'.
En este mismo sentido se pronunciaba otro joven asistente a la cacerolada, mochila en mano y con la intención de quedarse esta noche a dormir en la plaza, que incidía en la propuesta de conseguir una ley electoral que dé mayor representación a los partidos minoritarios, listas abiertas, o el 0,7 por ciento para ayuda al desarrollo.
Bajo el pseudónimo de 'Cachorro', este joven lanzaba un mensaje a la clase política y a toda la sociedad: 'esto no va a acabarse en el 22, es algo que hemos hablado y decidido quedarnos hasta que nos hagan caso' 'ESE FORD LO HE PAGADO YO'
Uno de los momentos más señalados de la protesta se ha producido cuando uno de los coches oficiales del Ayuntamiento ha entrado a las cocheras de la Casa Consistorial, momento en el que los manifestantes han gritado 'ese Ford lo he pagado yo'. Asimismo, también han realizado un pasillo simbólico a un camión de limpieza del Ayuntamiento para que se dirigiera a este: 'Ahí es donde hay que limpiar', han coreado los asistentes.
Durante la jornada del miércoles, los manifestantes acampados se organizaron en comisiones para trabajar sobre propuestas concretas y redactar un manifiesto con sus reivindicaciones. La Asamblea se volverá a reunir, como ya hiciera ayer, a las 20.00 horas.
El campamento, que cuenta con una ludoteca, distintos contenedores para reciclar la basura acumulada e, incluso, con un área de objetos perdidos, está rodeada por pancartas y cartulinas en las que se pueden leer, entre otros eslóganes, 'Si no puedo trabajar, cómo voy a cotizar', 'El bipartidismo no es democracia', 'No, you can't' o un 'Aquí yace la democracia' rotulado sobre un féretro.
A pesar de todo, algunos transeúntes se han parado y han mostrado ante los medios su desacuerdo con el tiempo y forma de la protesta, señalando que ésta debían realizarla 'los 5 millones de parados en la Moncloa' y no ahora en elecciones.